Latest posts

Los 11 nudos

Los 11 nudos es un pequeño relato que se basa en los 7 rayos sagrados que fluyen hacia la Tierra y hacia cada Ser, desde el Todo.

El primer rayo es el rayo azul. Sus cualidades son la omnipotencia, la protección y la fe cuando nos entregamos a la voluntad del Todo. 

El segundo rayo es el rayo amarillo. Sus cualidades son la iluminación, la sabiduría, el entendimiento y la com-prensión gracias al Amor que nace en nuestro CORAZÓN.

El tercer rayo es el rayo rosado. Sus cualidades son la compasión, la caridad, la hermandad accionándolos desde el Amor incondicional.

El cuarto rayo es el rayo blanco. Sus cualidades son la pureza y la integridad que nos permiten la evolución individual y la de la Humanidad.

El quinto rayo es el rayo verde. Sus cualidades son la verdad, la constancia y la sanación manifestadas en el día a día.

El sexto rayo es el rayo naranja. Sus cualidades son el servicio y la entrega sin egoísmo, aceptando en cada uno al Ser de Luz.

El séptimo rayo es el rayo violeta. Sus cualidades son la libertad, la transmutación, la transformación aplicadas en beneficio de todos en el Universo.

Todos tenemos las cuerdas que salen de nosotros y nos conectan con los rayos sagrados que fluyen del Todo y que se deben equilibrar en la balanza del Amor incondicional de cada Ser.

Cada rayo, cada cuerda nos acompaña a lo largo de nuestras vidas y cada vez que nos fundimos, que vibramos armónicamente con alguno de los rayos se forma un nudo en la cuerda de esa rayo sagrado.

Por ejemplo en la cuerda verde, cuya vibración sana, se crea un nudo cada vez que actuamos desde el CORAZÓN con la intención de sanar, ya sea a la Tierra o a cualquier Ser vivo.

Así, se van haciendo nudos, pero al mismo tiempo, se deshacen cuando en otro momento, en lugar de sanar, herimos con nuestros pensamientos, nuestras palabras o nuestras acciones.

Así vamos haciendo y deshaciendo nudos en cada una de las cuerdas. Cada cuerda representa un rayo y es en el conjunto de todas las cuerdas que debemos tener 77 nudos, 11 en cada cuerda.

Cuando llegamos al momento del nudo 77 hemos llegado a un grado de evolución suficiente como para atravesar de nuevo el manto Álmico y fundirnos con el Ser de forma definitiva.

No es fácil conseguir los 77 nudos, pero no hay que preocuparse, tenemos todo el tiempo, somos Seres eternos.

Posted in: Amor y Luz

Leave a comment